Recientemente ha aterrizado en Manresa uno se esos jugadores que son puro college.

Luke Maye fué profeta en su tierra. Nacido en un pequeño pueblo de North Carolina, jugó durante 4 temporadas para los Tar Heels a las órdenes de Roy Williams.

En 2017 se proclamó campeón de la NCAA cuando UNC venció a Gonzaga en Phoenix.

Maye vivió un momento de delirium tremens en el partido contra Kentucky correspondiente a Elite 8.

Situémonos: Estamos en Memphis, se enfrentan dos programas de sangre azul. Maye venía de hacer el primer doble-doble de su carrera en sweet 16 vs. Butler. Aún así no era titular, pues la pareja interior Isaiah Hicks+ Kennedy Meeks era innegocible de inicio. Sin embargo eran muchos los partidos en los que Maye disponía de los minutos finales y este era uno de ellos.

Faltan 14 segundos y UNC gana 70-73. Justin Jackson se dispone a lanzar un 1+1. Jackson jugó muy bien esa noche y cualquier cosa que fuera sumar pondría el partido muy difícil para Kentucky.

Pero JJ falla el primero y Kentucky pasa a la ofensiva. El balón llega en mínimas condiciones a Malik Monk que no necesita más y anota un triple desequilibrado para situar el empate a 73 a falta de 7 segundos.

No hay tiempo muerto, Carolina saca de fondo, Theo Pinson avanza sin solución de continuidad hasta que encuentra un pase abierto para Luke Maye...¡lanza pisando la linea de 3 y anota los puntos de la victoria!. ¡73-75 los Heels avanzan a la Final Four!.

¡Qué momento! recordemos que entre aquellos Wildcats de Calipari estaban: DeAaron Fox, "Bam" Adebayo, Derek Willis o Isaiah Briscoe.

Tras su paso por Trento, todo hace pensar que las cosas deben irle bien en Manresa. Mucha suerte!